Desarrollar una relación dinámica y segura con el agua.
Lograr movimientos técnicamente efectivos.
Desarrollar una capacidad de memorización motoria y de coordinación a cualquier ritmo.
Tener mayor dominio y seguridad en cualquier entorno marino.
Desarrollar una seguridad en sí mismo mediante las capacidades coordinativas adquirdas con el aprendizaje.
Divertirse aprendiendo, logrando un nado muy elegante.